Cuando los partidos y movimientos optan por este sistema, ellos escogen el orden en que los candidatos aparecen en sus listas. Ese orden es inmodificable y la gente vota por el candidato que está en la cabeza de la lista.
El número total de votos de una lista está determinado por los votos válidos que el candidato que encabezara la lista obtenga el día de las elecciones.